«Es una muy buena noticia para nosotros este reinicio de las competencias, es muy positivo. Se venía hablando desde fines de julio de la posibilidad de volver, con protocolos más estrictos incluso que en marzo, y digo que es muy buena noticia porque cuando volvimos a los entrenamientos, la expectativa más grande era cuándo podíamos volver a jugar. Somos un deporte que si bien no es de contacto, se juega en espacios cerrados, y esto limitaba la definición final», destacó Soledad Righi, entrenadora del voley masculino del Club Deportivo Jorge Newbery, que el pasado fin de semana volvió al ruedo en el torneo de la Asociación Santafesina de Voleibol.

El viernes anterior se disputó partido en Primera División, y el sábado, los sub 21 y sub 18 fueron locales ante Colón, siendo derrota para los primeros y victoria para la categoría menor. «Estamos con un calendario ya bastante acotado, pero con mucha actividad. En cada categoría se ajustó la competencia: en formativas, los grand prix (desde sub 12 a sub 16), juegan 4, de acá al 20 de noviembre. Y en el medio, se van a estar disputando las copas provinciales, que es una adaptación que se hizo este año. Y en los mayores, que juegan en forma de tira, se optó por jugar la ida, que se había iniciado en marzo, para finalizar en noviembre», que en sus últimos 15 días serán los playoffs -las finales de cada categoría-.

Respecto al voley femenino -que entrena con la profe Ayelén Bagnaroli-, el sistema competitivo es el mismo: «Este finde juega en sub 16 y este fin de semana tenemos la buena noticia que arrancan en sub 12, una categoría que a principios de año no teníamos y más allá del parate por la pandemia, pudimos armarla y este domingo tienen su primera fecha».

 

El bronce olímpido como «disparador para potenciar el deporte»

El bronce olímpico «para nuestros jugadores y jugadoras fue un hecho sumamente importante y valorativo… Los chicos se levantaban a las 5 a ver los partidos, o a la una y media, y se vivió con mucha pasión. Hablando con Guillermo (Alvarez, también entrenador de los equipos de varones) decíamos que esto puede ser un disparador para potenciar el deporte, sobre todo el masculino que es donde cuesta más juntar jugadores». De todos modos, «nosotros en el club estamos bien, los grupos se han mantenido… Si bien necesitábamos la competencia para mantener la motivación, tanto en masculino como en femenino se han mantenido y pudimos seguir trabajando en burbujas, ha fluctuado en minivoley y es lógico, por el parate y los cambios que tuvimos que hacer para trabajar».