Convivencia: coexistencia física y pacífica entre individuos o grupos que deben compartir un espacio. Cuando se abre el diccionario y se lee dicha palabra, nos invita a, claramente, reflexionar.

Siempre convivimos. Entre diferentes grupos etarios, diferentes masas sociales o, simplemente, diferentes personas, cada uno y cada una con su metabolismo, capacidad y formas de vivir la vida.

El encuentro entre los juveniles de Santa Paula y del Taller Pinquén de la ciudad de Gálvez pregona eso. No la inclusión, como a veces bien dicha está, sino el sinónimo de compartir momentos entre personas con diversas capacidades y que, en este caso, disfrutaron de un gran momento con el deporte como motor.

Durante la tarde de este viernes, los juveniles, desde Mini hasta U16, del ‘Azul’ recibieron con los brazos abiertos a los concurrentes del taller y durante una hora disfrutaron jugando a algo tan hermoso como es el básquetbol.

Risas, festejos, chillidos sobre el parquet, sonidos graves que provenían del bote de balón. Una mezcla sonora que dejó en evidencia una cosa: todos somos iguales y todos nos podemos divertir y aprender de cada uno.

Fuente: Prensa Santa Paula